jueves, 10 de octubre de 2013

Arroba




Nada majos, hoy nos vamos a metel con l´arroba. ¿Con ese signo raro que se pone pá  mandal emilios? No, joé, conociendome como me conocéis tiene que sel algo más antiguo y diferente, como l´arroba de medir. Estiaño el cuto divino pesaba lomenos  15 arrobas. Y tan divino que debía ser el cuto, daba de comer pa casi tol invierno y amás en muchos pueblos cuando lo rifan acaba en el Santo Hospital. ¿Estaba el cuto enfermo?  Ya joderá, a las pobres monjicas les tocaba la gracia de Dios y se quedaban con el gorrino y con el dinero de la rifa, anda que Dios no es generoso. Claro influenciado con los rezos del capellán que más de una vez se acordará d´el  y de alguna que otra novicia cuando pruebe el jamón, novicia divina, dirá.





A mí personalmente m´importa un carajo de donde venga el nombre. Que si viene del árabe ar-rub, la cuarta parte y otros van más allá y los lo relaciónan con el hebreo arba que significa cuatro. En todo caso la cuarta parte ¿de qué?.
Pues depende mucho de donde estemos, si en Castilla la cuarta parte de un quintal o 100 libras castellanas que vienen a ser al al cambio actual  unos 46 kilos o sea que una arroba serían unos 12 kilos escasos. Lo jodido de estos antiguos era que dividían todo por cuatro y q´el trigo y los cereales no lo medían por peso sino por volumen así que luego salía lo que salía, entr´el carpintero que  s´leiva la medida de las tablas  y el enrasador que se torcía "por l´humedá" pues que no salían dos arrobadas iguales.
La arroba no ha sido más que una escusa p´metenos con los sitemas de medida antiguos, abundantes y pródigos en palabros ya en desuso. Fanegas del árabe faddan, lo que pueden arar dos bueyes en un día  o también llamado yugada. Cahices cuya etimología remontan hasta uno de los antiguos idiomas persas, del parto nos llega la palabra kabiz, robos, almutes, del al mud y desde el latín modus, medida. Celemines, cuartales , azumbres, moyos, cántaras y garapitos, hasta la más simple de las medidas, la almueza, lo que cabe entre las dos manos juntas y agüecadas. En La Rioja se le llama almorzada, almuenza y almuerza. También zarpada, descripción ante la que me quito el sombrero. No no creo que haya otra palabra que describa como esta la medida.


 Por si esto fuera poco  nos queda tol palabrero de los puestos de control y gestión del abastecimiento. En una ciudad no entraba grano, vino o aceite de fuera sin pagar impuesto. Y además se guardaban los sobrantes de cosechas buenas y se regulaban los precios para impedir la especulación. Dicho de paso que esto también lo manda la Constitución Española, evitar la especulación  pero a más de uno se le debió caer el libro al río.... y se convirtió en papel mojado. Para eso estaban  los almudís ( de almute) los pósitos y alhóndigas, portazgos, fielatos o fielazgos pa cobrar las alcábalas,  sin olvidarnos del impuesto del garapito (garrafa) sobre el vino y la maquila o porción de grano o aceite que cobraban los molineros a cambio de la molienda.


 
 Todo un mundo que tiende a olvidarse con la unificación de medidas pero en el que los antiguos se desenvolvían de maravilla.  


 Salú pa tós.

No hay comentarios:

Publicar un comentario